viernes, 7 de febrero de 2014

¿PRINCIPIO O FIN?


Después de mucho tiempo leyendo los blogs de Rath y sus Piruleta y Patatona y de Mismellis y sus Repollete y Princesita, me he decidido a compartir lo que para mi ha sido un viaje largo, a veces duro a veces fácil, pero sobre todo un viaje en el que la mayoría de las veces me ha tocado pelear y del que, a día de hoy, voy saliendo vencedora.

Tengo casi 37 años y vivo en el norte, en una ciudad donde el invierno dura más de los 3 meses establecidos y el sol es un regalo muuuy caro de ver. Siempre he pensado que soy una persona fuerte que aguanta carros y carretas, pero en este proceso que me ha tocado vivir he descubierto que incluso el más fuerte tiene grietas que no sabían que existían. Y dicho esto, que como presentación no está mal, eh?; os contaré, lo mejor que pueda, cómo Pequeño Buda llegó a mi vida.

Yo siempre supe que quería ser mamá, desde que mi madre se negaba a comprarme la Barbie y los reyes no dejaron de traerme nenucos y barriguitas y me pasaba los días cambiándoles los pañales y dándoles de comer. Intuyo que como toda niña, aunque cuando nos vamos haciendo mayores los instintos nos llevan por derroteros distintos y algunas sienten que no necesitan o no quieren ser madres y otras, en cambio, que lo necesitan y/o quieren.

Yo era de las segundas, así que cuando con 17 años dejó de bajarme la regla y tras un examen ginecológico bastante desagradable, del que ya hablaré otro día, me derivaron a ginecología de infertilidad; lo primero que se me vino a la cabeza fue: y podré ser madre? No qué problema tenía, no si tenía solución, no; lo único que le pregunté al gine fue: y podré ser madre? Él me dijo que eso ya lo hablaríamos llegado el momento, que ahora sólo necesitaba saber que mis ovarios eran muy pobres, que seguramente (y así fue) nunca más me bajaría la regla, que tenía menopausia precoz y que a partir de entonces tendría que atiborrarme a pastillas para tener ciclos menstruales "normales".

Y yo me pregunté: esto será un principio o un fin? El principio de un camino para lograr lo que quiero o el final de algo que nunca podrá ser? Pero sólo tenía 17 años así que aún me quedaba mucho por vivir, pasar, disfrutar... antes de llegar a plantearme siquiera el ser madre, así que lo aparqué y viví.

2 comentarios:

  1. Hola Miren! Muchisimas gracias por leerme. Me ha hecho mucha ilusion saber que mi historia y la de Misme te ha animado a comenzar este blog del que desde hoy voy a leer cada vez que publiques. Un besito cielo y muchisimas felicidades por tu principe.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, si es que aún no me entero demasiado bien y hasta ahora no he visto que habías comentado... sorry! Besitos

      Eliminar